Reino Unido amaneció este lunes desconectado de gran parte de Europa y de algunos países de América Latina después que varias naciones cortaran sus vínculos de transporte debido al temor a una nueva cepa de coronavirus.
En Europa, Hungría, Portugal, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Bélgica, Austria, Suiza, Grecia, Irlanda y Bulgaria anunciaron restricciones a los viajes del Reino Unido, horas después de que el primer ministro Boris Johnson anunciara la rápida propagación de infecciones adjudicadas a la nueva cepa.
Bulgaria, Polonia, República Checa, Finlandia y Dinamarca también tomaron medidas semejantes. Suiza y Noruega han dado el paso, al igual que Turquía y Rusia, que se han sumado a la lista del bloqueo aéreo .
Del otro lado del Atlántico, Perú, Colombia, Chile, El Salvador, Argentina y Canadá son algunos de los países que suspendieron o restringieron sus vuelos desde el Reino Unido.
Esta variante del virus sería hasta un 70% más contagiosa, aunque no está demostrado que sea más letal. La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió de que también podría afectar a “la eficacia de algunos métodos de diagnóstico”.
Fuera de la UE, también Hong Kong, Arabia Saudita, Kuwait, India, Irán e Israel también suspendieron las conexiones con Inglaterra y los tres últimos incluso con Sudáfrica donde también se ha descubierto la nueva variante del virus SARS-CoV-2.
En Londres, el primer ministro Johnson presidirá este lunes una reunión de respuesta de emergencia para abordar la cuestión de los viajes internacionales, en particular el flujo de mercancías dentro y fuera de Reino Unido.
El Gobierno de Johnson observa con preocupación esta batería de medidas y el primer ministro ha convocado este lunes una reunión de urgencia para analizar de forma particular el caso de la frontera terrestre con Francia, completamente cerrada.
La noticia de la mutación del virus también puso en vilo a los países europeos y la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió a sus miembros que “refuercen sus controles”.
“Por toda Europa, allí donde la transmisión sea alta y esté extendida, los países deben reforzar sus procedimientos de control y de prevención”, indicó una vocera de la OMS para Europa.