El diputado federal Paulo Pimenta (PT-RS ) denunció este lunes que el gobierno de Jair Bolsonaro, inexplicablemente, a través de la Policía Federal, fijó un plazo hasta el 2 de abril para que los diplomáticos venezolanos que trabajaban en Brasil salieran del país.
“Esta iniciativa gratuita contra el pueblo venezolano, así como total falta de respeto a los brasileños, especialmente a los de los estados de Amazonas y Amapá, que han recibido ayuda de Venezuela para atender a los pacientes de covid-19 ”, dijo el diputado.
El congresista anunció que ingresará hoy con una adenda a una solicitud de hábeas corpus que presentó el año pasado, en la Corte Suprema de Justicia Federal, que garantizaba la permanencia de diplomáticos venezolanos en el país.
El 2 de mayo del año pasado, el ministro Luís Roberto Barroso, del STF, otorgó una orden judicial que suspendió la expulsión de 34 diplomáticos venezolanos por parte del gobierno brasileño. Aceptó la solicitud de hábeas corpus interpuesta por Paulo Pimenta y decidió que la medida cautelar sería válida mientras durara el estado de calamidad pública y emergencia sanitaria en Brasil.
“Si en ese momento el ministro entendió que los diplomáticos venezolanos no podían salir de Brasil por la pandemia, hoy la situación es mucho más grave y delicada”, dijo el parlamentario. “Ahora mismo, en una situación dramática aquí y allá, nada justifica esta postura criminal del gobierno brasileño contra los diplomáticos venezolanos”.
Pimenta recordó que desde enero, Venezuela, con la participación del cuerpo diplomático del país en Brasil, ha hecho posible, junto a gobernadores, diputados y senadores de los dos estados amazónicos “todas las condiciones posibles para el suministro de oxígeno a los hospitales”.
Señaló que Amazonas y Amapá han recibido oxígeno enviado por el gobierno venezolano, ya que la incompetencia del gobierno de Bolsonaro provocó la muerte de decenas de personas por asfixia por falta del producto en la red hospitalaria.
El diputado informó que los diplomáticos viven en Brasilia, Amapá y Amazonas; algunos tienen una función consular y juegan un papel estratégico para la cooperación bilateral en el área de la salud.
“Están siendo expulsados de forma gratuita, innecesaria e injustificadamente”, dijo Pimenta. “Es casi increíble que las personas que nos están ayudando en este momento, incluida la expansión del apoyo logístico para los dos estados, sufran tal persecución”.
El parlamentario recordó que tanto Brasil como Venezuela atraviesan un momento grave por la pandemia, lo que refuerza aún más la necesidad de que los diplomáticos venezolanos no sean removidos del país.
Ante la crisis sanitaria que vive Brasil por la ausencia de medidas gubernamentales para contener el covid-19, el canciller de la República Jorge Arreaza, manifestó el compromiso y la disposición de Venezuela en cooperar con el vecino país.
“Ratificamos la disposición de Venezuela de ayudar al hermano pueblo de Brasil a enfrentar la crisis sanitaria y humanitaria generada por el Covid-9”, publicó el diplomático a través de su cuenta en twitter.
Este mensaje del canciller de Venezuela se da en respuesta a la solicitud hecha por el líder de la oposición del Senado de Brasil, Randolfe Rodrigues, quien señaló que sostuvo conversaciones con el embajador venezolano, Alberto Castellar, a quien fue solicitado el apoyo del gobierno venezolano para auxiliar a los centros asistenciales con oxígeno.
“Acabo de hablar con el embajador venezolano Alberto Castellar, quien nos aseguró el apoyo del Gobierno venezolano a Macapá y Amapá en el tema del oxígeno. Movilizaremos la logística para efectuar la asistencia que estamos recibiendo”, refirió Rodríguez.
La Comisión Arns y Conectas Derechos Humanos presentaron ante la ONU una denuncia contra el presidente Jair Bolsonaro por su irresponsable manejo en la pandemia de covid-19 que ha cobrado la vida de 300 mil brasileños.
Ciudad CCS
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