La canciller Angela Merkel y los primeros ministros de los estados que forman parte de Alemania, acordaron este miércoles durante una reunión de emergencia extender hasta el 14 de febrero las medidas de confinamiento en ese país debido a la situación sanitaria provocada por la covid-19.
Para frenar la propagación de la pandemia, el Gobierno federal y los líderes de las 16 regiones determinaron mantener cerradas las escuelas, tiendas de productos no esenciales, restaurantes e instalaciones culturales y de ocio.
De igual manera, se decretará la obligatoriedad del uso de mascarillas en el transporte público y comercios, y se solicitará a empresas que faciliten el trabajo a distancia.
Pese al hincapié hecho por Merkel y varios expertos, en la reunión de varias horas no se aprobó imponer a nivel nacional un toque de queda nocturno, pues los líderes locales lo consideraron innecesario.
Las restricciones estaban concebidas para implementarse hasta el 31 de enero, pero la propagación del virus es elevada y se teme que nuevas cepas, como las identificadas en Reino Unido y Sudáfrica, provoquen más infecciones.
Tras el encuentro, Merkel recalcó la necesidad de adoptar más medidas y de mantener las precauciones, a pesar de la caída en el número de nuevos contagios durante varios días, según informó el martes el ministro de Sanidad, Jens Spahn.
El nuevo coronavirus ya ha afectado en Alemania a más de 2 millones de personas y ha causado 47.622 muertes, según datos del Instituto Robert Koch (RKI), que alertó sobre el repunte de los decesos provocados por la pandemia.
Telesur/Gráfica: Cortesía