El símbolo deportivo de la llama olímpica realiza, este domingo, un recorrido a través del Eurotunel donde ocurrirá el traspaso hacia un grupo de 24 portadores franceses que continuarán el camino hacia París, de cara a los Juegos Paralímpicos París 2024
A tan solo cuatro días del inicio de los juegos, la llama olímpica vuelve a encenderse, bajo lluvia y en Stoke Mandeville, Inglaterra, donde al término de la Segunda Guerra Mundial surgió la idea de estructurar estas competencias.
Casualmente en la inauguración de los Juegos Olímpicos Paris 2024, hace casi un mes, también el clima fue lluvioso. Por ello, el presidente del comité organizador de la cita deportiva, Tony Estanguet, bromeó a asegurar que el “clima caprichoso nos acompaña”.
En esta ocasión la llama olímpica fue prendida por los atletas paralímpicos británicos, Helene Raynsford y Gregor Ewan, de remo y curling en silla de ruedas, respectivamente.
Raynsford, quien alcanzó el primer título paralímpico de remo cuando debutó en esta disciplina en Beijing 2008, declaró a la prensa que era “un gran honor” ser una de las atletas que encendió la llama.
El espectáculo fue realizado en el estadio de la ciudad Stoke Mandeville y constituye la primera vez desde el año 2012, que se lleva a cabo en esta ciudad originaria de las competencias paralímpicas.
“Teníamos muchas ganas de venir aquí para encender la llama”, subrayó el presidente de la cita en referencia al mismo tiempo a la que llamó una “hermosa y fuerte historia”. Tras este acto, el presidente de Comité Paralímpico Internacional, Andrew Parsons, fue el primer portador de la antorcha.
La ceremonia de apertura de los juegos está prevista para el próximo 28 de agosto y se llevará a cabo en “los Campos Elíseos y la Plaza de la Concordia, orquestada, como la de los Juegos Olímpicos de julio, por el director artístico Thomas Jolly”.