El Gobierno de Haití anunció el martes el aumento de hasta el 115 por ciento de los precios del combustible en medio de la crisis económica y social que atraviesa el país caribeño.
El ministro de Economía y Finanzas, Michel Patrick Boisvert indicó que los nuevos precios serán efectivos a partir del viernes por lo que el galón de gasolina pasará a costar 250 gourdes (2,5 dólares), el de gasóleo pasa a 353 gourdes (3,53 dólares), y la parafina se venderá a 352 gourdes (3,52 dólares).
La medida no fue bien recibida por sectores progresistas quienes indicaron que la suba del combustible impactará significativamente en los 4.4 millones de personas que viven bajo inseguridad alimentaria.
El primer ministro haitiano, Ariel Henry ha sostenido que el Estado no puede seguir costeando los subsidios al combustible, que anualmente dejan una pérdida de 30 mil millones de gourdes (unos 300 millones de dólares).
La justificación que esgrimen las autoridades es una ley de 1995 que establece que cuando los precios suben en el mercado internacional Haití debe hacer los ajustes correspondientes, y cuando el precio baja, el país también lo hace.
En julio de 2018, el anuncio del aumento del precio de los combustibles causó varios días de manifestaciones violentas y tensiones en Haití que sacudieron las bases de poder del entonces presidente Jovenel Möise y llevaron a la renuncia del entonces primer ministro, Jack Guy Lafontant.