Representantes de movimientos populares presentaron este martes, en la Cámara de Diputados de Brasil, una solicitud de juicio político contra el presidente Jair Bolsonaro por una gama de posibles delitos cometidos por el mandatario; todo ello en el marco de la Jornada de Movilización “Fora Bolsonaro”.
Según sus promotores, desde el comienzo de su mandato, Bolsonaro “se ha centrado seria, repetida y sistemáticamente en los delitos contra la Constitución de la República, [con un] patrón de falta de respeto por la supremacía incuestionable del texto constitucional”.
La actuación de Bolsonaro termina, en opinión de los movimientos populares, “causando graves violaciones de los derechos humanos y poniendo en marcha graves amenazas a la vida, la salud, la integridad física, la salud ambiental y la seguridad alimentaria de millones de brasileños”.
Es posible atribuir a Bolsonaro, según los movimientos populares, el delito de improbidad administrativa, debido a que su desempeño en el Gobierno va en contra de “los principios que guían la administración pública”, previstos en el artículo 37 de la Constitución brasileña, como la legalidad, la impersonalidad, la moral, la publicidad y eficiencia.
En el extenso documento, sus firmantes describen en detalle algunos de los ataques de Bolsonaro a la prensa; la incapacidad del Gobierno para manejar la pandemia de la Covid-19; la desarticulación de los principales mecanismos de defensa ambiental; la extinción del Ministerio de Cultura, entre otras acusaciones.
De igual manera, hacen referencia a la violación de los derechos de la población negra y las comunidades indígenas; así como de los derechos individuales y colectivos de los trabajadores.
La mañana del martes, la capital, Brasilia, amaneció con cientos de cruces en representación simbólica de los más de 72.000 fallecidos que ha causado la pandemia de la Covid-19 en el país, segundo en el mundo con esos indicadores, solo superado por los Estados Unidos de Donald Trump.