Demócratas del Congreso, admiten que Estados Unidos perdió la batalla contra la Covid-19, ya que no existe una estrategia nacional de la administración de Donald Trump, para frenarla. “El país está en llamas”, indicó Anna Eshoo, miembro de la Cámara de Representantes por California.
Afirman que al menos 39 estados han visto un aumento de casos significativos entre ellos resalta Texas, Arizona, Oregon, Georgia, Florida, California y Ohio con las cifras más alarmantes. Actualmente el total de casos en Estados Unidos rebasa los tres millones de infectados, incluyendo los alrededor de 133 mil muertos, según los datos del rastreador digital Worldometer.
Por su parte el doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas,alega que estas cifras se debe a que muchos estados optaron por reabrir mientras los nuevos casos se encontraban en una meseta, cuando otros países permanecieron cerrados hasta que demostraron una fuerte reducción de las infecciones.
Además, afirmó que Estados Unidos fue mucho más indulgente que otros países en cuanto a permitir actividades sociales durante la primera etapa de la propagación del virus incluso en los territorios que adoptaron las medidas más estrictas. “Eso permitió la perpetuación del brote que nunca pudimos controlar muy bien”, dijo.
Por su parte, el almirante Brett Giroir, un alto funcionario de salud de la administración Trump, advirtió el jueves ante la Cámara baja que para nada están aplanando la curva, por el contrario “la curva sigue subiendo”.
Los demócratas acusan a Trump de estropear la respuesta del gobierno a la Covid-19, inicialmente minimizando la seriedad de la amenaza y luego rechazando el uso del nasobuco, el distanciamiento social y otras medidas preventivas propuestas por los expertos de salud, refiere nota de prensa del portal web de Prensa Latina.