“En nombre del presidente Nicolás Maduro, extendemos un saludo Bolivariano a Irán y expresamos nuestro agradecimiento por su firme rechazo al asalto perpetrado por el Ejército de Estados Unidos contra un buque mercante cargado de petróleo venezolano, bajo órdenes de la actual administración estadounidense”, anunció el canciller de la República Bolivariana, Iván Gil, tras la contundente declaración de la nación islámica a través del portavoz de la diplomacia persa.
Gil, a través de un mensaje en su cuenta oficial de Instagram, informó que Irán, mediante el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Ismail Baghaei, ha respaldado la ilegal piratería marítima de EE.UU. en el Mar Caribe, que Venezuela y todas las naciones comprometidas con el derecho internacional han denunciado al mundo.
El vocero iraní alertó que las acusaciones de EE.UU. contra Venezuela carecen de pruebas y la práctica que llevan a cabo los estadounidenses solo busca “crear pretexto para justificar sus acciones ilícitas a nivel internacional”.
“La acción de Estados Unidos contra el petrolero venezolano carece de cualquier base o legitimidad en el derecho internacional, y no es más que el ejercicio de la fuerza coercitiva y el matonismo institucionalizado a nivel global”, dijo el representante iraní en un video que adjuntó el Canciller Gil en su mensaje.
El vocero persa advirtió que, en el derecho internacional, lo hecho por las fuerzas de EE.UU. constituyen un claro delito, y no es admisible alegar leyes internas propias para cometer un crimen internacional, no confieren en modo alguno legitimidad “y es un claro ejemplo de piratería marítima y robo armado en altamar como ya hemos mencionado anteriormente”, agregó Baghaei.
“Si estas violaciones de la ley internacional se convierten en una práctica habitual y un patrón de conducta, todos los países y la comunidad internacional en su conjunto, resultarán perjudicados por ello”, sentenció, contundente, el diplomático iraní, al exhortar a los gobiernos y organismos internacionales condenar realmente la acción de Estados Unidos como una violación flagrante el derecho internacional.
El canciller venezolano cerró su mensaje denunciando, una vez más, que Estados Unidos no posee ni el derecho ni la jurisdicción para invocar sus leyes internas y sus bloqueos ilegales contra el comercio y las economías de otros países para justificar actos de piratería y ejecuciones extrajudiciales en aguas del Mar Caribe.
