El presidente de Israel, Isaac Herzog, se reunirá en Londres, Reino Unido; con el primer ministro británico, Keir Starmer. En respuesta, numerosas organizaciones de activismo solicitaron el arresto del político sionista, mientras que grupos de civiles protestaron en las calles por la presencia de Herzog en territorio inglés.
El Centro Internacional de Justicia para los Palestinos (ICJP) exigió que el político israelí sea investigado durante su visita a la nación europea, «bajo la sospecha de tener responsabilidad penal por presuntos crímenes de guerra», indicó la organización. Asimismo, manifestantes realizarán cacerolazos frente a la Chatham House, en donde ambos mandatarios se reunirán.
Mientras tanto, la organización no gubernamental, Amigos de Al-Aqsa, solicitó al director de Enjuiciamientos Públicos; Stephen Parkinson, y al fiscal general, Richard Hermer; que inicien procesos penales contra Herzog por incentivar ataques indiscriminados contra palestinos en la Franja de Gaza, así como a la infraestructura civil del enclave palestino, además de solicitar una orden de arresto contra el ejecutivo israelí.
«Los políticos británicos fracasaron en defender a los palestinos y enaltecer el Estado de derecho. Ahora hay una oportunidad para que las cortes intervengan», argumentó el fundador de Amigos de Al-Aqsa, Ismail Patel. «Es hora de acabar con la impunidad y defender el derecho internacional», extendió.
Por su parte, la líder de Amnistía Internacional de Reino Unido, Sacha Deshmukh, indicó que el presidente Herzog usó su cargo para «defender el castigo colectivo» de los palestinos. Mientras que el líder del Partido Verde de Inglaterra y Gales, Zack Polanski, también instó al arresto de Herzog. Además, docenas de legisladores firmaron una carta destinada a Starmer, la cual establece que la visita de Herzog «sugiere que el Reino Unido es indiferente a sus responsabilidades legales internacionales».