Una delegación rusa liderada por el viceministro de Exteriores, Mijaíl Bogdáno, realizó la primera visita a Siria desde el cambio del poder en Damasco y la asunción del grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham. Rusia y Siria buscan mantener sus relaciones históricamente estables y mutuamente beneficiosas, afirmó el viceministro Mijaíl Bogdánov.
La delegación rusa contó con la participación de representantes de varias agencias gubernamentales, quienes mantuvieron el martes conversaciones con el nuevo líder sirio, Ahmed al Sharaa. A la reunión también asistieron el ministro sirio de Exteriores, Asaad al Shaibani, y el ministro de Sanidad, Maher al Sharaa.
El viceministro señaló que ambas partes coinciden en sus enfoques fundamentales dirigidos a «preservar la integridad y la independencia de la República Árabe Siria».
«Subrayamos que los acontecimientos vividos por Siria en los últimos años y el cambio que se ha producido en el liderazgo de la nación no cambiarán la naturaleza de las relaciones entre nuestros dos países y que Rusia siempre está dispuesta a ayudar a estabilizar la situación y alcanzar soluciones adecuadas para diversos problemas económicos y sociales», declaró.