El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, rechazó este miércoles las medidas coercitivas impuestas por el Gobierno de Estados Unidos al país considerándola como un “ataque” a la soberanía.
El mandatario reseñó que “por primera vez se imponen (sanciones) a nuestro país, un miembro de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte). ¿Qué tipo de alianza es esta? Esta decisión es un ataque abierto a nuestros derechos de soberanía”.
El presidente turco consideró que “el objetivo real es evitar los recientes avances que nuestro país ha iniciado en la industria de defensa y hacer que seamos totalmente dependientes de ellos de nuevo”.
Las medidas anunciadas por Washington el pasado lunes ocurrieron tras la compra por Ankara del sistema de defensa antiaérea S-400 a Rusia, ante lo cual, el secretario de Estado, Mike Pompeo, recalcó que Estados Unidos “no tolerará transacciones significativas con el sector de defensa de Rusia”.
Pompeo explicó que las sanciones incluyen “una prohibición de todas las licencias y autorizaciones de exportación a la Presidencia de Industrias de Defensa (SSB) y la congelación de los bienes y la restricción del visado de Ismail Demir, presidente de la SSB, y otros oficiales de la SSB”.