El 5 de julio de 1811 es recordado como el nacimiento de Venezuela, convirtiéndose en la primera colonia en América que lograba emanciparse de la Corona Española y teniendo como protagonista de ese momento histórico a la Sociedad Patriótica integrada por Simón Bolívar y Francisco de Miranda.
Meses antes (2 de marzo), en la casa del Conde de San Javier, se habría instalado el Congreso General de Venezuela, compuesto por 30 diputados, siendo el primer Parlamento convocado en nuestra historia.
Estuvo conformado por 7 provincias: Caracas, Cumaná. Barinas, Margarita, Mérida, Barcelona y Trujillo. Provincias que formaban la Confederación Americana de Venezuela
El Congreso tenía el principal objetivo de lograr la redacción de la Constitución de 1811.
Simón Bolívar, en la sesión de la noche entre el 3 al 4 de julio de 1811 ante la Sociedad Patriótica, organización pro-independentista activa principalmente en Caracas entre 1810 y 1812, pronunció su primer discurso político en el cual expresa la necesidad de unión para independizarse de España.
Como grupo de presión, la Sociedad Patriótica había venido a ser conocida como el segundo Congreso, pero Bolívar abogó por el respeto del Poder Legislativo y la necesidad de que fuese el Congreso el que declarase la Independencia.
Simón Bolívar en este discurso expone:
“No es que hay dos congresos. ¿Cómo fomentarán el cisma los que más conocen la necesidad de la unión? Lo que queremos es que esa unión sea efectiva y para animarnos a la gloriosa empresa de nuestra libertad; unirnos para reposar, y para dormir en los brazos de la apatía, ayer fue una mengua, hoy es una traición. Se discute en el Congreso Nacional lo que debiera estar decidido.
¿Y qué dicen? Que debemos comenzar por una confederación, como si todos no estuviéramos confederados contra la tiranía extranjera. Que debemos atender a los resultados de la política de España. ¿Qué nos importa que España venda a Bonaparte sus esclavos o que los conserve, si estamos resueltos a ser libres? Esas dudas son tristes efectos de las antiguas cadenas. ¡Que los grandes proyectos deben prepararse en calma! 300 años de calma, ¿no bastan? La junta Patriótica respeta como debe, al Congreso de la Nación, pero el Congreso debe oír a la Junta Patriótica, centro de luces de todos los intereses revolucionarios.
Pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad sudamericana, vacilar es perdernos.
Propongo que una comisión del seno de este cuerpo lleve al Soberano Congreso estos sentimientos”.
En la mañana del 5 de julio continuaba el debate en el Congreso y en horas de la tarde de ese mismo día, se acordó redactar un documento cuya elaboración fue encomendada al diputado Juan Germán Roscio y al secretario del Congreso, Francisco Isnardi.
El documento debía contener los motivos y causas que produjeron la Declaración de la Independencia, para que luego de ser revisada y aprobada por el Congreso, sirviese de Acta y pasara al Poder Ejecutivo para legalizarlo.
Entre los firmantes se cuentan: Isidoro Antonio López Méndez, Juan Germán Roscio, Felipe Fermín Paul, Fernando Peñalver, el Marqués del Toro, José Ángel de Álamo, Lino de Clemente, Francisco Javier de Mayz, Francisco de Miranda, Juan Nepomuceno de Quintana, Manuel Palacio, Manuel Plácido Maneyro, Antonio Nicolás Briceño, entre otros.
El 7 de julio de 1811 el Congreso ratificó el Acta, se publicó el 14 de julio y no fue hasta el 17 de agosto que pasaría al Libro de Actas.
Para la profesora de geografía e historia de la U.E.P. San José de Cagua, ubicada en el estado Aragua, Ketty Olavarrieta, lo sucedido el 5 de julio no fue un proceso fácil, ya que tomó 10 años de batallas, luchas, victorias y también derrotas, pero que efectivamente valió la pena para construir y mantener esa independencia que ahora tenemos para siempre.
“La construcción de un país no solo se plasma en un papel, sino que se hace realidad todos los días con el accionar de todos los venezolanos que hacemos valer nuestra libertad, independencia valores y deberes ante la ley, por lo tanto es justo y necesario recordar las fechas que hicieron de nuestra historia lo que somos y recordándonos que somos un pueblo bravío y valiente que no se detiene ante ningún obstáculo y adversidad”, afirmó.
Olavarrieta, que cuenta con 5 años de experiencia como docente y que además dirige la Sociedad Bolivariana del liceo San José de Cagua, señala que dicha gesta histórica nos recuerda que, “como país que sigue luchando por su independencia y crecimiento propio ante intereses extranjeros actualmente, todo proceso histórico toma tiempo”.
“Es importante conocer nuestra historia, todavía somos naciones jóvenes y en proceso de descolonización que busca su propia identidad, como diría el escritor Gabriel García Márquez “cada vez pareciéndonos a nosotros mismos”, resaltó.
Igualmente, recalcó que la juventud juega un papel fundamental en seguir abriendo paso a caminos nuevos que lleven a fomentar todo el recorrido histórico que ha tenido Venezuela en búsqueda de un sistema que apoye nuestras características particulares y pluriculturales a nuestras necesidades y que además busque fortalecer nuestras carencias.
“La historia es la maestra que nos enseña a no repetir ningún evento del pasado”, concluyó.