Cientos de indígenas guatemaltecos se retiraron de una carretera principal en el oeste del país que mantuvieron bloqueada durante dos días, tras acordar con el gobierno el inicio de un diálogo en enero para resolver un conflicto limítrofe entre dos municipios mayas que el pasado fin de semana provocó la matanza de 13 personas.
“La primera quincena de enero se instalará una mesa de diálogo en la cual se va a tratar el asunto del límite” con el pueblo vecino de Nahualá, dijo el líder comunitario de Santa Catarina Ixtahuacán, Mateo Tzep.
El acuerdo se alcanzó luego de que dirigentes se reunieron con autoridades del gobierno en la capital, refiere AFP.
Los manifestantes de Santa Catarina Ixtahuacán bloquearon con piedras, neumáticos, ramas y bloques de concreto, por segundo día consecutivo, la carretera Interamericana en el kilómetro 170, en desafío al estado de sitio que el presidente Alejandro Giammattei impuso en ambos municipios tras la matanza.
En ese sitio, manifestantes y familiares velaron el lunes a 11 de las víctimas de la masacre, cuyos ataúdes fueron colocados en hilera durante horas sobre la carretera, en medio de un altar con flores, velas, humo de incienso y fotografías de los 13 niños, mujeres y ancianos asesinados.
Santa Catarina Ixtahuacán y Nahualá mantienen un conflicto desde hace 160 años por los límites entre ambos pueblos de la misma etnia maya.